La inflación y el salario
Los precios en el país continúan al alza; en el mes de octubre de 2017, la inflación acumulada en el país era de 6.4 por ciento, en agosto de este año alcanzó su máximo de 6.7 por ciento, el nivel más alto de los últimos años. En un año, de octubre de 2016 a octubre 2017, la inflación se incrementó un poco más del doble, lo que refleja un crecimiento promedio generalizado de los bienes y servicios.
En el caso de los municipios de Matamoros y Tampico, el crecimiento de los precios ha seguido una trayectoria similar a la nacional, aunque los cambios se han profundizado, ya que de 2016 a 2017 la inflación se ha triplicado. En julio de 2017, la inflación mensual para el municipio de Tampico era de 1.98 por ciento para octubre de 2017 los precios se incrementaron a un nivel de 6.2 por ciento.
Los efectos de crecimiento de los precios han sido mayores en la frontera norte del norte del estado, ya que su nivel supera tanto el nacional como el observado en el sur del estado, alcanzando un 7.1 por ciento para octubre 2017, aunque su mayor nivel lo alcanzó en febrero de este mismo año con una tasa de 8.4 por ciento. El hecho de que los precios sean mayores en este municipio se debe a que los bienes y servicios son más sensibles a los movimientos en los tipos de cambios, así que una depreciación continua de la moneda provocará en esta región del estado que los precios de los bienes se eleven casi de manera inmediata y se sincronizará más a los movimientos de los tipos de cambios.
El incremento de la inflación representa un duro golpe para la economía familiar, ya que se encarece el valor de los bienes y servicios a la población, afectando particularmente a los grupos más vulnerables. La afectación se da debido a que se reduce el poder adquisitivo de los consumidores, por tanto, el dinero que actualmente obtienen como ingreso resultará insuficiente para seguir comprando lo que generalmente compraban.
Para compensar el incremento de los precios, se requiere que se eleve en la misma cuantía el salario, de esta forma la población podría seguir comprando la misma cantidad de bienes y servicios que acostumbraba. Así que, si se espera que la inflación alcance el 7 por ciento anual, los salarios deberían incrementarse en la misma cuantía para mantener el mismo nivel de consumo del año previo.
En este sentido parece un tanto cuestionable el hecho de que el Consejo de Representantes de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos (CONASAMI) determinó que el salario mínimo en México se incrementará 10.4 por ciento, pasando de 80.04 a 88.36 pesos diarios, ya que la inflación fue menor, lo que nos hace pensar que es posible que existe la expectativa de que la inflación continúe creciendo.
También, la negociación del Tratado de Libre Comercio, es un factor que ha provocado movimientos del tipo de cambio, cuyo efecto provoca presiones en la inflación, lo que podría hacer que esta continúe creciendo en el país, afectando de manera particular la frontera norte del estado. Pero, además, este efecto del tipo de cambio también presiona los precios en los combustibles, de continuar la depreciación de la moneda podría provocar un crecimiento mayor en los precios.
Así que un incremento adicional del salario por arriba del incremento de los precios, resulta atractivo y popular, pero hay que hacerlo con cautela ya que dicho incremento adicional solo se puede justificar por un crecimiento de la productividad laboral, de lo contrario, generaría un crecimiento mayor en los precios dejando sin efecto el crecimiento adicional del salario. Usted ¿qué piensa?